Tienen una pinta apetitosa. ¿Verdad? Estos fueron el
primer intento, cuando todavía pensaba que el libro era un pozo de sabiduría arcana
y las recetas infalibles.
Con la lista de ingredientes no había problema, eran
fáciles de encontrar. Leámosla.
Para la masa: Para
el relleno:
Una yema de huevo 3
tazas de pasas
1/3 de cerveza oscura, a temperatura 1/3 de taza de azúcar moreno
ambiente ½
cucharadita de canela molida
2 cucharaditas de levadura ½ cucharadita de clavo molido
7 cucharadas de mantequilla sin sal ½ cucharadita de macis molido
3 y ¼ tazas de harina Una manzana, picada fina
1/3 de taza de leche 1/3
de taza de piñones
1/3 de taza de nata
1 cucharadita de canela molida Para el glaseado
1 cucharadita de clavo molido Una clara de huevo, ligeramente batida
1 cucharadita de macis molido 1/3 de taza de azúcar crudo
Un chorrito de agua de rosas (opcional)
Buscando en internet, descubrí que el macis era la
corteza de la nuez moscada así que lo sustituí por nuez moscada molida.
Me parecería que un tercio de cerveza era mucho, un botellín
de 33 cl. así de golpe, pero eso ponía la receta y allá que use toda esa
cantidad… Y quedo muy liquido y añadí mas harina a la mezcla y… Una imagen vale
más que mil palabras…
La levadura, en cucharaditas, pues puse de repostería,
normal de la que uso siempre… Pero el invento en cuestión tenía que levar
durante una hora y aquello no subía y espere otra hora y me dije pues será que
no sube más…
Hice los pastelitos, me acordé de la madre de las
cocineras rellenando con la amalgama resultante y hornee durante los 15 minutos
que decía la receta a unos templados 180º. Pero mi horno es de gas, así que seguí
horneando otro ratito más hasta que tomaron un maravilloso y apetitoso tono
dorado.
Y sabían a harina, eran como masas infames de harina…
El relleno estaba bueno, era la parte positiva.
Después del primer experimento fracasado, una buena
amiga me descubrió algunos misterios que no conocía.
Y la receta queda transformada de esta manera:
Para la masa: Para
el relleno:
Una yema de huevo 400
Gr de pasas
1 Dl de cerveza tostada 80 Gr de azúcar moreno
Un paquete de 25 Gr de levadura fresca 1/2 cucharadita de canela molida
105 Gr de mantequilla sin sal 1/2 cucharadita de clavo molido
500 Gr de harina 1/2 cucharadita de macis o nuez moscada molida
1 Dl de leche 1
manzana picada muy fina
1 Dl de nata liquida 70
Gr de piñones
1 cucharadita de canela molida
1 cucharadita de clavo molido Para el glaseado
1 cucharadita de macis o nuez moscada Una clara de huevo, batida
molida Azúcar
blanco o moreno
Empezamos con la masa, en un cuenco mezcla la yema,
la cerveza y la levadura y déjalo durante 30 minutos delante de un radiador o
el lugar más caliente de la cocina para que fermente ligeramente. Tiene que
quedar un líquido con una pinta y un olor no muy agradable y espuma flotando
por encima. No te preocupes no se ha estropeado y ese sabor no quedará en los
bollitos.
Mientras reposa, en un cuenco grande vierte la harina
y añade la mantequilla a temperatura ambiente, ve pellizcando la mantequilla
con la harina hasta conseguir una mezcla homogénea con la textura de la miga de
pan y sin trozos visibles de mantequilla.
En un cazo templa la leche y la nata, junto con las
especias, añádelo al cuenco con la harina y agrega la mezcla de la cerveza y la
levadura.
Mezcla los ingredientes hasta formar una pasta homogénea
que se pueda manejar con las manos sin que quede pegada a estas, si aun esta pegajosa
añade harina muy poco a poco.
Dejara en el cuenco cubierta con un paño durante una
hora para que suba, ya sabes cerca de un radiador o el lugar más caliente de la
cocina.
Entretanto reserva 60 gr de las pasas y trocea el resto,
pela, retira las semillas y trocea la media manzana mezcla ambos ingredientes
con los piñones.
Si ha transcurrido la hora de levado parte un trozo
de masa de unos 70 gramos, las pasas reservadas, el azúcar moreno y las
especias y bátelo hasta conseguir una pasta marrón más bien liquida que añadirás
al resto de las frutas.
Precalienta el horno entre 180º y 200º grados, según
el tipo de horno y lo bien que cocine, ya sabes cada horno es un mundo…
Parte la bola de masa en cuatro partes, coge un
triangulo y cubre los otros tres con un paño para que no se resequen.
En el hueco del cuenco pondremos una cucharadita o
dos de relleno, formas una empanadilla y metes las puntas hacia el centro del
sellado, para formar un bollito de forma ovalada.
Repite el proceso hasta que acabes con la masa y el
relleno. Obtendrás 32 pastelitos rellenos.
Bate ligeramente la clara reservada y pinta sobre
cada uno de los bollos. Espolvorea rápidamente azúcar blanco o moreno al gusto
y dales tres cortecitos a lo ancho hasta llegar al relleno para que no exploten
al hornear.
Hornea durante unos 20 minutos o media hora, hasta
que estén dorados,

El macis mencionado en la receta se puede localizar
en la sección gourmet del corte ingles. El resto de ingredientes no son difíciles
de encontrar
Bueno, al final quedaron ricos :) Eso sí, confirmo que son como barritas energéticas, son bastante intensos, mejor comerlos de uno en uno.
ResponderEliminarSi es que me voy a quedar sin amigos... No hago mas que experimentar con ellos las recetas....
ResponderEliminarLa magia de la levadura fresca, jeje...éstos en cuánto tenga in hueco los quiero hacer, tienen pinta de estar muy ricos! Gracias Mag!
ResponderEliminarEstan muy ricos, y son estupendos para llevar a ReVs, asi que muy posiblemente podais probarlos en proximos eventos. La version mejorada por supuesto!!!!!
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